Clásico es en la historia de la música, la rivalidad entre cantantes, compositores o bandas. Desde Salieri con Mozart en el siglo XVIII, hasta Bob Marley con Peter Tosh , se han producido discrepancias; aunque muchas veces estas responden a manejos mediáticos, que alientan posibles rencillas con la correspondiente alza en las ventas.
El libro Beatles vs. Stones, que lleva como subtítulo “La rivalidad más grande en la historia del rock”, no está ajena a estas disensiones por medios de prensa , y es lo principal en el libro del historiador británico John McMillan.
Beatles vs. Stones es un libro documentado rigurosamente , que cuenta con una excelente narración periodística. Sobre la rivalidad entre ambas bandas inglesas, Los Beatles y Los Rolling Stones, el autor plantea que los managers, son los principales responsables, de la debacle final de unos y del éxito “estirado”, hasta hoy, de otros. McMillan es capaz de no enfocarse en una individualidad, siendo que ambas bandas , contaban con personas de caracteres fuertes. No hay protagonistas en este libro: no lo es Mick Jagger, ejerciendo su seductora femineidad sobre hordas de machos indoeuropeos, lo que es un dato no menos atractivo; ni Los Cuatro Fabulosos, enloqueciendo a desbocadas jóvenes. Los dimes y diretes: los Beatles acusarán a los dionisiacos Stones , de robarles su esencia antes de la fama y es aquí donde destaca la figura de Brian Epstein, manager de los Beatles, que obliga a los cuatro de Liverpool , a vestirse de terno, mostrarse como burgueses y dejar atrás sus alocadas noches de furia en Hamburgo. Frente a los medios, los Beatles se comportan como señoritos, pero son en realidad rufianes; mientras que los Rolling Stones juegan sucio, aunque egresaron de privilegiados colegios privados. Tom Wolfe, el padre del Nuevo Periodismo, reafirmaba esta visión en 1965: “Los Beatles quieren tomarte la mano, los Stones quieren quemar tu ciudad”.
En cuanto a texturas musicales, es necesario destacar la labor del productor George Martin, quien mejor y primero, organizó el material programático de Los Beatles a partir del 62, adecuando los tonos (John, barítono; George, tenor; Paul, ambos; Ringo, barítono) y ampliando la instrumentación hacia las familias de cuerdas frotadas, pulsadas y vientos. El banjo y la armónica , vendrán directamente del blues norteamericano, para seguir contrarreformando a los europeos.
Por la causa del blues ambas bandas jugarán. Considero que McMillan, se inclina demasiado al optar por una de las dos bandas: por Los Beatles. El autor, buscando tal vez el climax final de su obra, presenta entre otros documentos, un dossier de prensa para desmerecer la vigencia artística de los Rolling Stones, algo que comparo con un hincha perdido en la barra contraria , en una final de fútbol. No creo que hoy, después de tanto tiempo, se pueda considerar a los Stones estáticos. Sobre todo después de leer las casi 300 páginas de este libro, creo que los Stones estuvieron más cerca de la música pura, algo que explica su supervivencia musical. -
Stones Books: Beatles vs. Stones by John McMillan
Classic is in music history, the rivalry between singers, songwriters and bands. From Salieri to Mozart in the eighteenth century to Bob Marley Peter Tosh, there have been discrepancies; but often they respond to media handling, encouraging potential quarrels with the corresponding rise in sales.
The book: Beatles vs. Stones, which is subtitled "The greatest rivalry in the history of rock", is no stranger to these dissensions by the media, and is the main thing in the book by British historian John McMillan.
Beatles vs. Stones rigorously documented book, which has an excellent journalistic narrative is. About the rivalry between the two British bands, The Beatles and The Rolling Stones, the author states that managers are primarily responsible, the final debacle about and success "stretched" until today, from others. McMillan can not focus on individuality, being that both bands had people of strong character. No players in this book is not Mick Jagger, exercising its seductive femininity on hordes of Indo-European males, which is no less attractive data; or The Fab Four, crazy young runaway. The bickering: accuse the Beatles, the Stones Dionysian, to steal their essence before the fame and this is where the figure of Brian Epstein, manager of the Beatles, which requires four of Liverpool, dressed in a suit , shown as bourgeois and leave behind their fury crazy nights in Hamburg. In front of the media, the Beatles behave like gentlemen, but are actually ruffians; while the Rolling Stones play dirty, although they graduated from privileged private schools. Tom Wolfe, the father of New Journalism, reaffirmed this view in 1965: "The Beatles want to hold your hand, the Stones want to burn your city".
As for musical textures, it is necessary to highlight the work of producer George Martin, who best and first organized the program material The Beatles from 62, matching tones (John, baritone George, tenor, Paul, both; Ringo , baritone) and expanding the instrumentation to the families of bowed strings, plucked and wind. The banjo and harmonica, come directly from American blues to follow contrarreformando Europeans.
For the sake of both bands play blues. I consider McMillan, leans too by opting for one of the two bands: by The Beatles. The author, looking perhaps the final climax of his work, has among other documents, a press kit to detract from the artistic life of the Rolling Stones, which compare with a lost fan in the opposite crowd in a football final . I do not think that today, after so long, you can consider the static Stones. Especially after reading the almost 300 pages of this book, I think the Stones were closer to pure music, which explains his musical survival. -
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