Mick Jagger , el diablo se rebautizó Sir (parte 2)

«Hacerse rico rápido es parte de la fantasía del rock & roll. Quien diga lo contrario, miente»

elmundo.es

por Raquel Quílez 

Es el más conservador de los Stones, el enamorado de los millonarios, la cabeza fría. El Sir. Durante 50 años, Mick Jagger (1943, Dartford, Inglaterra) ha vivido una neurótica dualidad: la del hombre de negocios disfrazado de rock & roll star. Fiel al espíritu Rolling Stones, tuvo encontronazos con la ley, le detuvieron con drogas y llegó a la sobredosis —o eso cuenta la leyenda—. Devoró toda la química que pudo, pero nunca se dejó arrastrar. Siempre supo que prefería a la 'jet set' antes que a los 'groupies' adictos que atraía la banda. Y terminó en brazos del 'establishment'. Hasta el punto de que, en 2003, su satánica majestad se rebautizó Sir.

El sentido práctico le venía de serie. Se matriculó en la London School of Economics gracias a una beca en secundaria. Pero eran los 60 y la fantasía de vivir de la música aumentaba: no dudó en jugársela con Richards, vecino de la infancia y socio de por vida, pero no abandonó la universidad hasta asegurarse de que le acogerían si el grupo fallaba. Fue el primer paso para que este hijo de la clase media inglesa —su padre era profesor de gimnasia; su madre, ama de casa— terminase rodeado de aristocracia, coleccionando arte o alternando con Warhol y posando para él.

Sus relaciones sentimentales marcaron su ascensión social: 'la Faithfull', Bianca y Jerry Hall le abrieron las puertas del mundo en el que él quería estar. Pero el balance no cuadraba: con siete hijos de cuatro mujeres e incontables aventuras, los grandes escándalos de Jagger han sido siempre sexuales. La primera relación sonada la vivió con Marianne Faithfull, que le dotó de un aura de intelectual que se quedó para siempre, pero la dejó a ella vagando por las calles consumida en heroína. Después llegó Bianca Pérez Moreno de Macís, una joven de la alta sociedad nicaragüense que le absorbió, para celos de Richards, hasta que se casaron en 1971 en Saint-Tropez, en una fiesta de la que salieron en yate dejando al personal, lo más 'cool' de la época, en intenso desvarío etílico.

Jagger llegaba al matrimonio con una hija —de la actriz Marsha Hunt— y sumó otra con Bianca, de la que nueve años después se divorció. Las infidelidades siempre estuvieron ahí hasta que inició una relación con Jerry Hall, prometida de Bryan Ferry, con la que se calmó durante un tiempo. Se refugió en un rancho en Richmond y tuvo cuatro hijos; se convirtió al hinduismo y se casó en Bali. Pero la historia acabó como acostumbraba en él: Hall le plantó 20 años después cuando, cansada de aventuras —incluida Carla Bruni— dejó embarazada a una modelo. 25 millones de euros le costó el desvarío.

Pero su relación más intensa la ha vivido siempre con Richards. Cuentan los que les conocen que Mick siempre quiso ser Keith y Keith siempre quiso ser Mick. Se adoraban hasta que empezaron a odiarse. En 'Jagger', el libro sobre su vida que ha escrito el periodista Marc Spitz, cuenta que el germen de su 'ruptura' estuvo en el rodaje de 'Performance', en 1968, en el que Jagger mantuvo sexo con la entonces pareja de Keith, Anita Pallenberg, mientras éste se reconcomía. Hoy el abismo que les separa es inabarcable. La magia se esfumó entre ellos.

Sus detractores dicen que Jagger siempre vio a la banda como un medio para mantener su cara vida, mientras Richards ponía el corazón en ello. Lo cierto es que lo intentó por libre: tiene cuatro discos en solitario —el primero, 'She's the Boss', lo grabó en 1985— y ha probado con proyectos como 'Superheavy', junto a Dave Stewart, y un sinfín de aportaciones a bandas sonoras y trabajos de terceros. También con el cine y como productor: en 2001 fundó Jagged Films y en 2008 fue coproductor y guionista del 'Shine a Light' de Scorsese. También interpretó papeles como el de Greta, un transformista en el Berlín nazi, de 'Bent' (1997) o el proxeneta de 'The man from Elysian Fields' (2002). Eso sí, rechazó hacer carrera política como quisieron los laboristas. Y evitó erigirse en líder de la catarsis juvenil del 68. Lo del altruismo y los ideales nunca fue con él.

El dinero le ganó la batalla al mito. Jagger es el guardián del negocio, aunque el ideal se resista y no cueste imaginarle a la carrera en el escenario por más años que pasen. Debe de ser verdad que el rock cura el sobrepeso, las canas y la vejez.

Mick Jagger, Sir renamed the Devil (Part 2)

"Getting rich quick is part of the fantasy of rock & roll. Anyone who says otherwise is lying "

elmundo.es

by Rachel Quílez

It is the most conservative of the Stones, the lover of millionaires, a cool head. The Sir. For 50 years, Mick Jagger (1943, Dartford, England) has lived a neurotic duality: the business man dressed as rock & roll star. True to the spirit Rolling Stones, had run-ins with the law, he was arrested with drugs and came to the overdose, or so the legend goes. He devoured all the chemistry he could, but never was carried away. He always knew he preferred the 'jet set' before the 'groupies' addicts attracted the band. It ended in the arms of the 'establishment'. To the extent that in 2003, his Satanic Majesty was renamed Sir.

Practicality will come as standard. He enrolled at the London School of Economics on a scholarship in high school. But it was the 60 and the fantasy of living out of music grew: did not hesitate to gamble with Richards, childhood neighbor and partner for life, but left the university to ensure that if the group would welcome him failed. It was the first step for this son of the English middle class-his father was a gym teacher, his mother a housewife-ended surrounded by aristocracy, collecting art or alternating with Warhol and posing for him.

His romantic relationships marked his social ascension 'Faithfull', Bianca and Jerry Hall opened the doors of the world in which he wanted to be. But the stock did not fit: with seven children by four wives and countless adventures, big scandals Jagger has always been sexual. The first high-profile relationship with Marianne Faithfull lived it, which gave him an aura of intellectual stayed forever, but left her wandering the streets consumed heroin. Then came Bianca Perez Moreno de Mace, a young Nicaraguan socialite absorbed him to jealousy of Richards, until they married in 1971 in Saint-Tropez, at a party who left the yacht, leaving the staff, as 'cool' at the time, in severe delirium ethyl.

Jagger came to marriage with a daughter of actress Marsha Hunt, and added another with Bianca, of which nine years later divorced. The infidelities were always there until he started a relationship with Jerry Hall, Bryan Ferry fiancee, with whom he settled down for a while. He took refuge on a farm in Richmond and had four children, she converted to Hinduism and married in Bali. But the story ended as usual in him, Hall was planted 20 years later when, tired of adventures, including Carla Bruni-knocked up a model. EUR 25 million cost him the madness.

But his intense relationship has always lived with Richards. They know that those who always wanted to be Keith Mick and Keith always wanted to be Mick. They worshiped until they began to hate. In 'Jagger', the book about her life written by journalist Marc Spitz, that the germ of his 'break' was on the set of 'Performance' in 1968, which remained Jagger sex with then-partner Keith, Anita Pallenberg, while it gnawed. Today, the gulf that separates them is overwhelming. The magic was gone from them.

Critics say Jagger always saw the band as a way to keep your face life, while Richards put his heart into it. The truth is that I tried for free: it has four solo albums, the first, 'She's the Boss', was recorded in 1985 - and proved with projects like 'Superheavy', with Dave Stewart, and countless contributions to soundtracks and work of others. Also with the film and as a producer: in 2001 he founded Jagged Films and in 2008 was co-producer and writer of 'Shine a Light' of Scorsese. She also played roles as Greta, a transformer in Nazi Berlin, from 'Bent' (1997) or the pimp of 'The Man from Elysian Fields "(2002). Of course, refused to enter politics as they wanted Labour. And avoided erected a leader in the juvenile catharsis 68. The ideals of altruism and never went with him.

The money he won the battle to the myth. Jagger is the guardian of the business, although the ideal is no cost to resist and to imagine him on stage race for how many years pass. It must be true that the rock cures overweight, gray hair and old age.